Erradicación de cultivos de coca: Sí pero no

Cocaleros asustan al gobierno
Lo que ningún gobierno había concedido a los cocaleros, el de Alan García, por intermedio de su ministro de Agricultura, se lo brindó de rodillas a los cocaleros. Cedió a sus demandas y suspendió la erradicación de los cultivos de coca en una zona donde mayoritariamente la producción va hacia el narcotráfico.

El festejo. Luego de firmar el acuerdo, Elsa Malpartida y Nancy Obregón encabezaron una marcha de cocaleros por la ciudad en señal de triunfo. La erradicación forzosa de los cocales quedaba en suspenso. (Foto cortesía La República)

Además han logrado que sean empadronados, con lo cual buscan un viso de legalidad, como si el ministro desconociera que un grueso número de productores empadronados en el país no cumplen con registrar su producto a Enaco, porque básicamente su producción va hacia las pozas de maceración para la elaboración de pasta básica de cocaína, que después será refinada para obtener la cocaína.

Escuchábamos incrédulos al ministro de Agricultura, Juan José Salazar, decir en canal N (La hora N) defendiendo el acta firmada en Tocache, que no teníamos una política antidrogas, que falta la voluntad política para controlar los insumos que van hacia esas zonas del país, que se indemnizará a los pobrecitos cocaleros cuyos cultivos “legales” le fueron erradicados, que se empadronará a todos los productores cocaleros y se compadecía de los productores diciendo ¿de que van a vivir, si los productos alternativos no son rentables?.

Por eso, la conductora temporal de la Hora N, expresó su extrañeza diciéndole al ministro ¿No estará Ud. sufriendo el “Síndrome de Estocolmo”?, a lo que Salazar justificaba el acta firmada diciendo que se había acordado que se empadronará, pero que en aquellos terrenos donde haya una poza de maceración, se realizará la erradicación en un perímetro de mil metros.

Lo que sucederá es que se producirá coca y los narcos acopiarán la hoja de coca y establecerán las pozas en zonas de la selva donde no hay cultivos, pero la producción de la droga va a continuar, ahora algo legalizada por la gestión del ministro.

En realidad el gobierno se asustó por la toma de la carretera en Tocache, lo cual es un delito, y ha terminado cediendo a las pretensiones de los cocaleros.

Pero porqué viajó el ministro de Agricultura y no el de Interior Alva Castro. Será que no quiere quemarse pronto con una papa caliente y tal vez el premier Del Castillo no lo pueda manejar (recuérdese el enfrentamiento por el caso de la renegociación de los patrulleros, donde se impuso el criterio de Alva). El problema de restablecer el orden por la toma de la carretera recae en el Ministerio del Interior, así como la lucha contra el narcotráfico, y la erradicación de los cultivos ilegales está dentro de ese rubro.

Sofocones en Palacio de Gobierno y en la Presidencia del Consejo de Ministros por las declaraciones del ministro, que motivaron una reunión de emergencia del Premier con Alva Castro, Ministro del Interior, Allan Wagner de Defensa y el propio Salazar para tratar de arreglar el entuerto. Como el mismo Del castillo lo expresara, evitar los titulares lapidarios del día siguiente.

Al filo de la medianoche finalmente el gobierno le enmienda la plana al ministro de Agricultura, y dice que si tiene un plan integral antidrogas, lo que pasa es que es secreto dijo Alva Castro. Parece que el plan es tan secreto que ni el propio ministro Salazar lo conocía. Por eso, parafraseando una popular canción decimos sobre la erradicación de cultivos ilegales de coca, SÍ PERO NO, QUE NO, QUE NO.

El asunto es grave, porqué podría tener consecuencias funestas para la ratificación del TLC con Estados Unidos, cuyo gobierno podría interpretar es que se está relajando los compromisos de erradicación de los cultivos ilegales de coca. Máxime si el propio ministro Salazar expresa a manera de queja, que la política antidrogas es manejada por directivas antidrogas de Estados Unidos.

El gobierno tiene ante si una papa caliente, cuyo epílogo aún no hemos visto, porqué eso de que sólo se ha suspendido la erradicación por diez días, expresado por Salazar para tratar de apagar el incendio, no será aceptado por los productores cocaleros, quienes ya ha pulseado y notado la debilidad del gobierno ante el bloque de carreteras. Es muy probable que vuelvan con las mismas reprobables tácticas, porqué en Tocache tiene que haber erradicación de todas maneras, ya que está demostrado que el grueso de su producción de coca va al narcotráfico.

Recién entonces veremos la entereza y sapiencia de este gobierno para enfrentar el problema y restablecer el principio de autoridad.
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