EE.UU: Problemas de homosexualismo remece a los Republicanos
El caso del congresista del partido republicano estadounidense Mark Foley, representante del estado de Florida, quien luego del escándalo por el envío de mensajes lascivos a jovencitos que trabajan en las oficinas del congreso norteamericano, ha tenido que dimitir reconociendo su homosexualidad, ha destapado el mundo gay en la política norteamericana.
En extenso articulo en The New York Times firmado por MARK LEIBOVICH, ayer 8 de Octubre del 2006 el periodista relata la forma como ha golpeado el escándalo Foley a los gays del partido republicano.
Creemos que este suceso puede influir para un cambio a favor de los demócratas en la composición del parlamento en las elecciones de noviembre. Como se sabe los representantes demócratas son mayormente opuestos a las políticas emprendidas por Bush que busca la firma de tratados de libre comercio como el que fuera negociado con el Perú. y está pendiente de ratificación en el congreso norteamericano
Si los demócratas logran hacerse con el control de las cámaras del congreso podría peligrar el TLC Peru – EE.UU., si antes de la renovación parlamentaria no se logra culminar dicho proceso; lo cual representaría un duro golpe pera nuestros exportadores, teniendo en cuenta que el ATPDA vence a fines del presente año y por lo tanto las exportaciones peruanas tendrían que pagar aranceles.
A continuación el citado artículo, el cual hemos traducido para Uds:
El caso de Foley trastorna el balance de los republicanos Gays
Cada mes o algo así , 10 miembros superiores del staff de Capitol Hill sostienen una cena para compadecerse sobre su difícil experiencia como republicanos gays. En una pervertida referencia al Proyecto de la Calle K, la campaña del partido para construir influencia a lo largo del pasillo de cabildeo de la ciudad, se llaman asi mismos como el Proyecto de la Calle de P, una referencia a un corte de la calle a través de un enclave gay local.
Para muchos de esos hombres y de otros republicanos gays en la política de Washington, la reconciliación de sus vidas privadas y papeles públicos ha requerido una existencia discreta. Pero la semana pasada, el escándalo de Foley ha trastornado ese equilibrio cuidadoso.
Desde que Foley, represente republicano de la Florida, dimitió luego que se revelara que él había enviado mensajes electrónicos sexuales explícitos a las páginas masculinas, los republicanos gays en Washington han estado bajo lo que se describe como de "asedio y suspicacia."
Algunos grupos conservadores culparon la "forma de vida gay" y la fuerza de acopio de la "agenda gay" por el escándalo. Otros compararon homosexualidad con la pedofilia, un acoplamiento que ha ultrajado tremendamente a hombres gays y a lesbianas.
Los blogs y los sitios web conservadores precisaron que los miembros gays que desempeñaron papeles principales en investigar el caso de Foley, sugieren que el partido fue traicionado por los hombres gays, quienes intentaban ocultar la mala conducta de uno de los suyos. Entre tanto, un grupo de los activistas gays, encolerizados por lo que ven como hipocresía de los republicanos gays, ha comenzado a circular un documento conocido como La Lista, una relación de los miembros gays del staff del congreso y sus jefes republicanos.
"Usted puede ver como sería fácil que alguna gente culpe los gays por algo que pudo traer abajo al partido en el congreso," dijo Brian Bennett, consultor político republicano gay. Él fue por largo tiempo jefe del staff del ex representante republicano de California Robert K. Dornan, quien se refería regularmente a los gays como Sodomitas.
"Estoy sólo esperando a alguien con una posición de autoridad para hacer de esto una edición gay," a dicho el Sr. Bennett sobre el caso de Foley.
La presencia de los homosexuales, particularmente hombres gays, en posiciones cruciales del personal ha sido en gran medida permanentemente ocultada por décadas en la vida de los Republicanos, y particularmente en años recientes. Han desempeñado papeles decisivos en aprobar legislación, campañas corrientes y desarrollo de carreras políticas.
Conocidos en el argot del iniciado como la Mafia del Terciopelo o los Elefantes Rosados, los republicanos gays tienden a ser menos abiertos sobre su orientación sexual que sus contrapartes demócratas. Aunque el G.O.P. se denominan a si mismos como "el partido de Lincoln" y promueven la tolerancia, son percibidos como hostiles por muchos hombres y lesbianas gays. Los republicanos han promovido una agenda de los "valores tradicionales", mientras que algunos conservadores han tornado la "subcultura gay radical" en un bandido confiable de la campaña. Y hay pocos modelos visibles en el partido; Jim Kolbe representante de Arizona es el único abiertamente republicano gay en el congreso.
Por culpa del caso Foley que se ha distribuido hacia fuera en días recientes, alguna gente en Washington han sugerido que la respuesta inadecuada de los lideres republicanos en alarmar sobre el Sr. Foley fuera orientada escrupulosamente en comerciar una entonces una llamada edición gay. Mientras tanto, algunos miembros del staff republicano se preocuparon que varios hombres gays cogidos en el escándalo podrían ser tratados de mala manera.
Esto Incluye a Kirk Fordham, una vez jefe del staff de Sr. Foley que dimitió miércoles como ayudante del representante republicano de Nueva York, Thomas M. Reynolds, y Jeff Trandahl, ex oficial de la secretaría de la cámara de representantes, un puesto clave al mando de centenares de miembros de la plana mayor y programa de la página. Los dos hombres deben haber sido los primeros en conocer de las comunicaciones inadecuadas del Sr. Foley. Junto con la dirección republicana, ellos han sido criticados por no poder actuar más agresivamente para parar el comportamiento del miembro del Congreso, y posiblemente cubrir al Sr. Foley.
El Sr. Fordham y el Sr. Trandahl no ocultaban su homosexualidad, y eran bien conocidos en la comunidad gay de Washington. (ninguno retornó las llamadas telefónicas que pedían su comentario.) Otros, vigorosamente protegían su vida privada.
"Usted aprende realmente a dividir bien en compartimientos estancos ," dijo un estratega republicano que, como muchos republicanos gays entrevistados para este artículo, hablaron solamente anónimamente por el miedo de afectar su carrera.
La historia del Sr. Fordham ilustra las tensiones potenciales entre la vida privada y el trabajo profesional. Después de salir de la oficina de Sr. Foley en 2004, él trabajó como director de finanzas para la campaña de senador Mel Martínez, republicano de la Florida. En esa ocasión, un volante de la campaña de Martínez acusaba al rival político de favorecer el "lobby homosexual radical" apoyando la legislación de los crímenes del odio que incluían las protecciones para los hombres gays y las lesbianas.
Uno de los hechos inevitables, dijo el Sr. Bennett, ex ayudante de Dornan, es que "hay justo algunos días en que es duro ser un republicano gay."
Preguntado porqué él permanecía en el partido, el Sr. Bennett dio una respuesta común en los republicanos gays: él dijo que permanecía fundamentalmente en sincronia con los mínimos principios del partido de gobierno y de sus propuestas a la seguridad nacional, y que él estaba confiado en que cambiarían lo que él considera sus actitudes antigay.
"Estoy luchando duramente, cada día," dijo Sr. Bennett, que estaba entre un grupo pequeño de los republicanos gays que apoyaron decididamente a George W. Bush durante su campaña presidencial del 2000.
Como el Sr. Bennett, otros miembros gay del equipo trabajan para virar las políticas que consideran infames para sus observaciones y hostilidad para su causa.
Roberto Traynham, el ayudante superior de las comunicaciones del senador Rick Santorum, republicano de Pennsylvania, aguantó el polvillo radiactivo de una entrevista con The Associated Press el 2003, en el cual el Sr. Santorum parecía comparar homosexualidad con bestialidad, bigamia e incesto, entre otras cosas. Traynham había sido abiertamente gay por años, pero eso no era sabido extensamente en su vida profesional - hasta que un abogado gay reveló su orientación sexual el año pasado. Traynham confirmó el informe, y Santorum publicó una declaración en apoyo a su ayudante.
En contraste con lo que opinan muchos como la retórica cada vez más antigay de la derecha, los miembros de ambas partidos dicen que ha habido una tolerancia cada vez mayor para los hombres gays y lesbianas dentro de las filas republicanas.
"Ha habido un cambio en relación a 20 años atrás, cuando la gente era hiperconsciente de permanecer en el closet," dijo Steve Elmendorf, estratega demócrata abiertamente gay que era el principal ayudante de Richard A. Gephardt, ex representante de Missouri, que sirvió como el líder democrático. "ahora hay más de una evolución a la regla “no preguntar, no decir””
Una adición podría ser "no hacer alarde ", "usted apenas no la usa en su manga, o en el fundillo," dijo a un miembro gay del equipo republicano.
"Yo siempre hice un punto de citar a mujeres," dijo Bennett, que divulgó que él era gay después del cargo con Dornan.
Otros precisan eso que la carrera del jefe son la prioridad, y se espera que los miembros del personal permanezcan en el fondo. la "discreción es lo que esperan la mayoría de los miembros de su personal, no importa quién usted es," dijo Tracey St. Pierre, quien fue jefe del staff de Charles T. Canady, ex representante republicano de la Florida.
"Para muchos republicanos conservadores, el solo hecho de ser gay es en sí mismo un acto de indiscreción," dijo la Srta. St. Pierre, que es gay pero que lo ocultaba hasta hace poco antes salir de la oficina de Canady. Cuando ella trabajó con él a mediados de 1990, una de sus principales causas era la legislación que prohibiría la unión entre personas del mismo-sexo. La Srta. St. Pierre, que trabaja para una agencia federal, se considera una independiente ahora.
El código del comportamiento extendido por los mismos políticos republicanos, un punto subrayado por Foley, que apenas esta semana reconoció públicamente que era gay. Él aparecía en público con mujeres siempre que era posible y las reuniones y fiestas llevados a cabo en su hogar, según describió un huésped lo adornaba con fotografías de él con atractivas mujeres.
Foley había rechazado siempre discutir su orientación sexual, un asunto que atrajo la atención en aumento mientras que él consideraba su postulación para el senado en 2004. En medio de la intensificación se rumoreaba sobre su vida personal, él decidía no funcionar.
A pesar del silencio de Foley, la gente de Capitol Hill asumió que él era gay. "era sabida comúnmente en Capitol Hill por el personal y los miembros," dijo Ray LaHood, representante republicano de Illinois. la "gente tiene sus propios estilos de vida y ellos entienden sus propios asuntos y juegan por las reglas."
Joe Scarborough, ex miembro del Congreso republicano por la Florida quien sirvió con Foley, dijo, "si usted es un republicano gay, usted tiene que actuar como un republicano." Scarborough, que ahora es el anfitrión de “Scarborough Country” (país de Scarborough) en MSNBC, dijo "actuando como un republicano” vinculó el salir exigido en el barro de la campaña "hablando acerca de armas, masticando tabaco y montando alrededor en un carro recolector."
Él puso en contraste eso con los demócratas gays, "quién puede apuntalar alrededor y todavía consigue una certera ovación ." Él citó el caso de Gerry E. Studds ex representante demócrata de Massachusetts que es abiertamente gay, que se embrolló en un escándalo del sexo, que viró la página y aun ganó una reelección. Y el representante del Barney Frank, otro congresista demócrata gay de Massachusetts, ha logrado el estado casi de icono entre los hombres gays y las lesbianas.
Los miembros gays de ambas partidos describen la materia de Foley como algo que podría comprometer el papel que los hombres gays y las lesbianas han asumido en la política republicana.
Un estratega republicano gay de la campaña dijo que él temía que los conservadores "jugaran a la base" y redoblaran sus esfuerzos de vilipendiar a los homosexuales. "es uno de los tramos del partido cuando estás en problemas," él dijo "muchos de nosotros estamos conteniendo nuestra respiración para ver cómo ésta juega hacia fuera."
En extenso articulo en The New York Times firmado por MARK LEIBOVICH, ayer 8 de Octubre del 2006 el periodista relata la forma como ha golpeado el escándalo Foley a los gays del partido republicano.
Creemos que este suceso puede influir para un cambio a favor de los demócratas en la composición del parlamento en las elecciones de noviembre. Como se sabe los representantes demócratas son mayormente opuestos a las políticas emprendidas por Bush que busca la firma de tratados de libre comercio como el que fuera negociado con el Perú. y está pendiente de ratificación en el congreso norteamericano
Si los demócratas logran hacerse con el control de las cámaras del congreso podría peligrar el TLC Peru – EE.UU., si antes de la renovación parlamentaria no se logra culminar dicho proceso; lo cual representaría un duro golpe pera nuestros exportadores, teniendo en cuenta que el ATPDA vence a fines del presente año y por lo tanto las exportaciones peruanas tendrían que pagar aranceles.
A continuación el citado artículo, el cual hemos traducido para Uds:
El caso de Foley trastorna el balance de los republicanos Gays
Cada mes o algo así , 10 miembros superiores del staff de Capitol Hill sostienen una cena para compadecerse sobre su difícil experiencia como republicanos gays. En una pervertida referencia al Proyecto de la Calle K, la campaña del partido para construir influencia a lo largo del pasillo de cabildeo de la ciudad, se llaman asi mismos como el Proyecto de la Calle de P, una referencia a un corte de la calle a través de un enclave gay local.
Para muchos de esos hombres y de otros republicanos gays en la política de Washington, la reconciliación de sus vidas privadas y papeles públicos ha requerido una existencia discreta. Pero la semana pasada, el escándalo de Foley ha trastornado ese equilibrio cuidadoso.
Desde que Foley, represente republicano de la Florida, dimitió luego que se revelara que él había enviado mensajes electrónicos sexuales explícitos a las páginas masculinas, los republicanos gays en Washington han estado bajo lo que se describe como de "asedio y suspicacia."
Algunos grupos conservadores culparon la "forma de vida gay" y la fuerza de acopio de la "agenda gay" por el escándalo. Otros compararon homosexualidad con la pedofilia, un acoplamiento que ha ultrajado tremendamente a hombres gays y a lesbianas.
Los blogs y los sitios web conservadores precisaron que los miembros gays que desempeñaron papeles principales en investigar el caso de Foley, sugieren que el partido fue traicionado por los hombres gays, quienes intentaban ocultar la mala conducta de uno de los suyos. Entre tanto, un grupo de los activistas gays, encolerizados por lo que ven como hipocresía de los republicanos gays, ha comenzado a circular un documento conocido como La Lista, una relación de los miembros gays del staff del congreso y sus jefes republicanos.
"Usted puede ver como sería fácil que alguna gente culpe los gays por algo que pudo traer abajo al partido en el congreso," dijo Brian Bennett, consultor político republicano gay. Él fue por largo tiempo jefe del staff del ex representante republicano de California Robert K. Dornan, quien se refería regularmente a los gays como Sodomitas.
"Estoy sólo esperando a alguien con una posición de autoridad para hacer de esto una edición gay," a dicho el Sr. Bennett sobre el caso de Foley.
La presencia de los homosexuales, particularmente hombres gays, en posiciones cruciales del personal ha sido en gran medida permanentemente ocultada por décadas en la vida de los Republicanos, y particularmente en años recientes. Han desempeñado papeles decisivos en aprobar legislación, campañas corrientes y desarrollo de carreras políticas.
Conocidos en el argot del iniciado como la Mafia del Terciopelo o los Elefantes Rosados, los republicanos gays tienden a ser menos abiertos sobre su orientación sexual que sus contrapartes demócratas. Aunque el G.O.P. se denominan a si mismos como "el partido de Lincoln" y promueven la tolerancia, son percibidos como hostiles por muchos hombres y lesbianas gays. Los republicanos han promovido una agenda de los "valores tradicionales", mientras que algunos conservadores han tornado la "subcultura gay radical" en un bandido confiable de la campaña. Y hay pocos modelos visibles en el partido; Jim Kolbe representante de Arizona es el único abiertamente republicano gay en el congreso.
Por culpa del caso Foley que se ha distribuido hacia fuera en días recientes, alguna gente en Washington han sugerido que la respuesta inadecuada de los lideres republicanos en alarmar sobre el Sr. Foley fuera orientada escrupulosamente en comerciar una entonces una llamada edición gay. Mientras tanto, algunos miembros del staff republicano se preocuparon que varios hombres gays cogidos en el escándalo podrían ser tratados de mala manera.
Esto Incluye a Kirk Fordham, una vez jefe del staff de Sr. Foley que dimitió miércoles como ayudante del representante republicano de Nueva York, Thomas M. Reynolds, y Jeff Trandahl, ex oficial de la secretaría de la cámara de representantes, un puesto clave al mando de centenares de miembros de la plana mayor y programa de la página. Los dos hombres deben haber sido los primeros en conocer de las comunicaciones inadecuadas del Sr. Foley. Junto con la dirección republicana, ellos han sido criticados por no poder actuar más agresivamente para parar el comportamiento del miembro del Congreso, y posiblemente cubrir al Sr. Foley.
El Sr. Fordham y el Sr. Trandahl no ocultaban su homosexualidad, y eran bien conocidos en la comunidad gay de Washington. (ninguno retornó las llamadas telefónicas que pedían su comentario.) Otros, vigorosamente protegían su vida privada.
"Usted aprende realmente a dividir bien en compartimientos estancos ," dijo un estratega republicano que, como muchos republicanos gays entrevistados para este artículo, hablaron solamente anónimamente por el miedo de afectar su carrera.
La historia del Sr. Fordham ilustra las tensiones potenciales entre la vida privada y el trabajo profesional. Después de salir de la oficina de Sr. Foley en 2004, él trabajó como director de finanzas para la campaña de senador Mel Martínez, republicano de la Florida. En esa ocasión, un volante de la campaña de Martínez acusaba al rival político de favorecer el "lobby homosexual radical" apoyando la legislación de los crímenes del odio que incluían las protecciones para los hombres gays y las lesbianas.
Uno de los hechos inevitables, dijo el Sr. Bennett, ex ayudante de Dornan, es que "hay justo algunos días en que es duro ser un republicano gay."
Preguntado porqué él permanecía en el partido, el Sr. Bennett dio una respuesta común en los republicanos gays: él dijo que permanecía fundamentalmente en sincronia con los mínimos principios del partido de gobierno y de sus propuestas a la seguridad nacional, y que él estaba confiado en que cambiarían lo que él considera sus actitudes antigay.
"Estoy luchando duramente, cada día," dijo Sr. Bennett, que estaba entre un grupo pequeño de los republicanos gays que apoyaron decididamente a George W. Bush durante su campaña presidencial del 2000.
Como el Sr. Bennett, otros miembros gay del equipo trabajan para virar las políticas que consideran infames para sus observaciones y hostilidad para su causa.
Roberto Traynham, el ayudante superior de las comunicaciones del senador Rick Santorum, republicano de Pennsylvania, aguantó el polvillo radiactivo de una entrevista con The Associated Press el 2003, en el cual el Sr. Santorum parecía comparar homosexualidad con bestialidad, bigamia e incesto, entre otras cosas. Traynham había sido abiertamente gay por años, pero eso no era sabido extensamente en su vida profesional - hasta que un abogado gay reveló su orientación sexual el año pasado. Traynham confirmó el informe, y Santorum publicó una declaración en apoyo a su ayudante.
En contraste con lo que opinan muchos como la retórica cada vez más antigay de la derecha, los miembros de ambas partidos dicen que ha habido una tolerancia cada vez mayor para los hombres gays y lesbianas dentro de las filas republicanas.
"Ha habido un cambio en relación a 20 años atrás, cuando la gente era hiperconsciente de permanecer en el closet," dijo Steve Elmendorf, estratega demócrata abiertamente gay que era el principal ayudante de Richard A. Gephardt, ex representante de Missouri, que sirvió como el líder democrático. "ahora hay más de una evolución a la regla “no preguntar, no decir””
Una adición podría ser "no hacer alarde ", "usted apenas no la usa en su manga, o en el fundillo," dijo a un miembro gay del equipo republicano.
"Yo siempre hice un punto de citar a mujeres," dijo Bennett, que divulgó que él era gay después del cargo con Dornan.
Otros precisan eso que la carrera del jefe son la prioridad, y se espera que los miembros del personal permanezcan en el fondo. la "discreción es lo que esperan la mayoría de los miembros de su personal, no importa quién usted es," dijo Tracey St. Pierre, quien fue jefe del staff de Charles T. Canady, ex representante republicano de la Florida.
"Para muchos republicanos conservadores, el solo hecho de ser gay es en sí mismo un acto de indiscreción," dijo la Srta. St. Pierre, que es gay pero que lo ocultaba hasta hace poco antes salir de la oficina de Canady. Cuando ella trabajó con él a mediados de 1990, una de sus principales causas era la legislación que prohibiría la unión entre personas del mismo-sexo. La Srta. St. Pierre, que trabaja para una agencia federal, se considera una independiente ahora.
El código del comportamiento extendido por los mismos políticos republicanos, un punto subrayado por Foley, que apenas esta semana reconoció públicamente que era gay. Él aparecía en público con mujeres siempre que era posible y las reuniones y fiestas llevados a cabo en su hogar, según describió un huésped lo adornaba con fotografías de él con atractivas mujeres.
Foley había rechazado siempre discutir su orientación sexual, un asunto que atrajo la atención en aumento mientras que él consideraba su postulación para el senado en 2004. En medio de la intensificación se rumoreaba sobre su vida personal, él decidía no funcionar.
A pesar del silencio de Foley, la gente de Capitol Hill asumió que él era gay. "era sabida comúnmente en Capitol Hill por el personal y los miembros," dijo Ray LaHood, representante republicano de Illinois. la "gente tiene sus propios estilos de vida y ellos entienden sus propios asuntos y juegan por las reglas."
Joe Scarborough, ex miembro del Congreso republicano por la Florida quien sirvió con Foley, dijo, "si usted es un republicano gay, usted tiene que actuar como un republicano." Scarborough, que ahora es el anfitrión de “Scarborough Country” (país de Scarborough) en MSNBC, dijo "actuando como un republicano” vinculó el salir exigido en el barro de la campaña "hablando acerca de armas, masticando tabaco y montando alrededor en un carro recolector."
Él puso en contraste eso con los demócratas gays, "quién puede apuntalar alrededor y todavía consigue una certera ovación ." Él citó el caso de Gerry E. Studds ex representante demócrata de Massachusetts que es abiertamente gay, que se embrolló en un escándalo del sexo, que viró la página y aun ganó una reelección. Y el representante del Barney Frank, otro congresista demócrata gay de Massachusetts, ha logrado el estado casi de icono entre los hombres gays y las lesbianas.
Los miembros gays de ambas partidos describen la materia de Foley como algo que podría comprometer el papel que los hombres gays y las lesbianas han asumido en la política republicana.
Un estratega republicano gay de la campaña dijo que él temía que los conservadores "jugaran a la base" y redoblaran sus esfuerzos de vilipendiar a los homosexuales. "es uno de los tramos del partido cuando estás en problemas," él dijo "muchos de nosotros estamos conteniendo nuestra respiración para ver cómo ésta juega hacia fuera."
Etiquetas: actualidad, internacional, opinión
posted by El brujo político at 5:42 p. m.
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