Después de las movidas de los diferentes grupos políticos con representación congresal, finalmente quedaron conformadas las dos listas que competirán mañana por la presidencia del Congreso. Como se había anunciado la lista oficialista la preside Luis Gonzáles Posada y la lista opositora la encabeza el pepecista Javier Bedoya de Vivanco.

Después de la pugna para conquistar los votos necesarios ¿ Quién ganará la mesa directiva del Congreso?

La candidatura oficialista presidida por Gonzáles Posada, a decir de los congresistas apristas está respaldada por una lista “multipartidaria” conformada por el congresista (¿ex upepista?) Aldo Estrada Choque, la fujimorista Martha Moyano Delgado y el representante del micro partido denominado Partido Demócrata, Carlos Torres Caro; quienes tendrían a su cargo respectivamente la primera, segunda y tercera vicepresidencia.

La lista opositora de Bedoya está conformada además por Carlos Bruce (Alianza Parlamentaria), Rafael Yamashiro (Unidad Nacional) y Mario Peña (AP), para la primera, segunda y tercera vicepresidencia, respectivamente.

Destacamos el carácter “multipartidario” de la lista oficialista por qué contraviniendo el reglamento del Congreso que rigen estas elecciones parlamentarias, la designación de Aldo Estrada no cuenta con la anuencia de su grupo político. Es mas, luego de un anecdótico incidente durante el anuncio de la candidatura aprista, los dirigentes upepistas han anunciado la expulsión de Estrada de UPP. La designación de Torres Caro, que al conformar un grupo de sólo tres parlamentarios, también contravendría el Reglamento, ya que su grupo ni siquiera tiene la cantidad suficiente de miembros para presidir comisiones.

Entonces la lista gobiernista, la conforman básicamente el APRA y el Grupo Parlamentario Fujimorista.

Es lamentable la imagen que transmite al país el partido de gobierno en su afán desesperado por mantener el control del Parlamento Nacional, que reedita manejos que creíamos desterrada de nuestra política, como es propiciar el transfugismo, o la política de Divide y reinarás, tal vez inspirados en las prácticas que desarrollaban sus socios fujimoristas cuando detentaban el poder.

En nuestro anterior comentario sobre esta elección de la mesa directiva del Congreso decíamos que hemos visto como algunos medios “concordaban” con la prédica oficialista contra el grupo opositor sobre el “pacto contra natura del PPC con el humalismo. Preguntamos esta prédica es de conciencia o está “motivada”. Ya hemos apreciado como medios “motivados” pero torpes lanzaban titulares para ganar la aprobación de la población hacia una gestión. ¿se acuerdan los "publicherres" de El Chino y la Razón a favor del Ministerio de Vivienda de Garrido Lecca. Esperamos que esa campaña contra la candidatura opositora no responda a esos juegos antidemocráticos.

Por otra parte, creemos que lo mejor que le puede pasar al gobierno es que gane la oposición, y si se fomenta el desgobierno desde el Congreso, el Ejecutivo puede tener una válvula de escape ante la percepción ciudadana.

Por el contrario, si el Congreso cumple su rol fiscalizador y de apoyar la gobernabilidad, generando las leyes que la nación necesita, el gobierno se verá fortalecido.

Pero el oficialismo ha hecho lo imposible para seguir detentando todo el poder, cuando lo que el pueblo votó en las pasadas elecciones generales fue una división de poderes. Respetemos pues, la voluntad general, observando las reglas democráticas y trabajando todos por el bien del país y de los peruanos.

Mañana a las 10 a.m. son las elecciones para renovar la mesa directiva del Congreso. Esta noche José Vega Antonio ha anunciado que 12 parlamentarios upepistas, que primero dijeron votarían en blanco, han comprometido su voto por la lista opositora. Con este estado de cosas, ¿ Quién ganará finalmente la mesa directiva? .

Sea quien sea el ganador, esperamos que gane la institucionalidad democrática. Que luego del debate interno de cada partido, los miembros de esas colectividades políticas voten por los candidatos que sus partidos han decidido, y no se fomente el divisionismo y la traición.

Finalmente, esperamos que el grupo que gane, haga una gestión pensando en los sagrados intereses de la patria y no necesariamente en los intereses de sus partidos políticos.

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