El accionar errático del gobierno

Hoy se celebra un aniversario mas del autogolpe perpetrado por Alberto Fujimori contra la democracia, quien luego constituyó un gobierno autoritario en sociedad con su asesor (hermano siamés) Vladimiro Montesinos y con el soporte del poder militar, cuyo gobierno terminó siendo el mas corrupto de nuestra historia republicana.

El 5 de abril de 1992 la constitución y las leyes fueron violadas por un presidente que después nos enteramos tenía la nacionalidad japonesa. La democracia peruana fue pisoteada por un presidente que asesorado por un siniestro personaje como Vladimiro Montesinos, hicieron tropelía y media con el estado.

Gracias a los registros en video de aquellos aciagos años, el pueblo peruano y el mundo entero tomamos conocimiento del grado de degradación moral y corrupción a los que llegó el régimen fujimorista. Aunque las voces opositoras, las fuerzas democráticas y alguna prensa independiente alertaron sobre los oscuros manejos que hacían los siameses Fujimori-Montesinos, y era además evidente el silenciamiento de la prensa, el copamiento de las instituciones como el poder judicial, el Ministerio Público, los organismos electorales, etc., los videos han dejado un fiel testimonio de lo que nunca mas debemos permitir los peruanos que suceda nuevamente en nuestro país.

A falta de un partido político, el fujimontesinismo empleó a a los militares y fuerzas policiales como su soporte y tenía y creía que co-gobernarían por 20 años. Pero la unión de las fuerzas políticas democráticas lograron tumbarse a ese engendro del mal que hizo mucho daño a la institucionalidad del país.

El grado de corrupción a que llegó el fujimontesinismo tiene secuelas hasta el presente, sino baste ver los casos de corrupción descubiertos el año pasado en el ejército, como los malos manejos de oficiales en la construcción de la carretera a Cabana, los avituallamientos para el ejército en mal estado, la simulación de consumo excesivo de la gasolina por algunas unidades del ejército, etc.

Así mismo los casos de corrupción en la adquisición de patrulleros, ambulancias denunciados por la prensa y paradas a tiempo en el actual gobierno.

Se puede argumentar que la corrupción es un mal endémico del país, pero el mal ejemplo de las prácticas corruptas del régimen fujimorista se han arraigado en los diferentes niveles de nuestros funcionarios públicos. Esto no significa que estemos disculpando el grado de responsabilidad política o penal que tengan los funcionarios puestos por este gobierno.

Lo que nos preocupa es que el actual gobierno del presidente García, que fue perseguido por el dictador Fujimori, en una especie de Síndrome de Estocolmo, ahora tenga al parecer un pacto secreto bajo la mesa con las fuerzas fujimoristas, en pro de la impunidad del extraditable ex presidente.

Si bien es cierto García tiene un primer vicepresidente proveniente del partido de Alex Kouri, personaje que establecía estrategias políticas con Montesinos y era uno de sus gallos políticos de tapada futuros, es un escándalo que este gobierno, tenga la desfachatez de nombrar a personajes tan visibles como el ex premier fujimorista Pandolfi. Ante el clamor de la prensa y de los opositores políticos, tuvo que dejar sin efecto su nombramiento, casi en vísperas de un aniversario mas del autogolpe del chino, porqué este operador de Montesinos estaba inhabilitado por el congreso de la República , donde el mismo premier Del Castillo votó en su oportunidad por la sanción política.

Esperamos que el gobierno no siga cometiendo errores tan garrafales como el descrito en alianzas con las fuerzas oscuras del fujimorato y que por el contrario ponga todo su esfuerzo por lograr la extradición de Alberto Fujimori, que es un sentir de las mayorías democráticas del país.

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