Maggie Q es la revelación del cine norteamericano, después de deslumbrar al mundo en la nueva versión de Duro de Matar, donde interpreta a una malvada karateka.

Puro talento y una figura perfecta
Mai es la jefa de espías que enfrenta al recio Bruce Willis en Duro de Matar 4.0. El personaje le cae perfectamente a Maggie Q, la actriz de 1,7 metro y medidas casi ideales: 86-57-90, que deja perplejos a los espectadores cuando protagoniza una pelea sin límites a golpes y patadas dentro de un automóvil.

Salvaje y refinada, muchos recordarán a esta belleza de ojos rasgados por su participación en Misión Imposible 3, de la mano de Tom Cruise, donde quedó claro que está para encarar papeles de alto riesgo.

Nacida el 22 de mayo de 1979 en Hawai, EEUU, es hija de padre norteamericano, con sangre irlandesa y polaca, y de madre vietnamita.

La joven comenzó su carrera en Hong Kong, donde empezó a dar rápidos pasos hacia la fama gracias a su delicada belleza en portadas de las principales revistas de moda y actualidad.

Su perfil dramático empezó a tomar forma luego de personificar en Hong Kong a una aspirante a modelo que ultimaba a sus competidoras de pasarela en Model from hell.Nacida como Maggie Quigley, para algunos “el arma más deliciosa y letal del mundo”, esta morocha oriental vuelve a dejar huella con sus golpes y su mirada penetrante en otro éxito de taquilla.
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