El pragmatismo de Uribe y Chávez
El octavo encuentro bilateral de los presidentes Álvaro Uribe y Hugo Chávez, este viernes cerca de Bogotá, estará dominado por el papel del mandatario venezolano en la búsqueda de un acuerdo para liberar a 46 rehenes en poder de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Se trata de una reunión de dos presidentes que militan en corrientes ideológicas opuestas, pero que son pragmáticos.
Mientras Uribe es el principal aliado del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, en América Latina, Chávez es, junto a Fidel Castro, de Cuba, su más enconado contradictor en la región.
El presidente Chávez se entrevistará en Bogotá con su colega colombiano, Álvaro Uribe
Después de Estados Unidos, Venezuela es el segundo comprador de las exportaciones colombianas. Y, a diferencia del primero que importa sobre todo bienes primarios de Colombia, Venezuela adquiere mucha manufactura.
Más allá de la ideología, Uribe y Chávez han logrado emprender proyectos conjuntos, como el gasoducto binacional, que conectará a La Guajira con el Zulia y que está por entrar en funcionamiento.
Ese pragmatismo, según Gabriel Misas, director del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales (Iepri), con sede en Bogotá, ha incluido la congelación de la discusión de temas muy sensibles para los dos países, como el viejo diferendo limítrofe por las áreas marinas y submarinas del Golfo de Venezuela.
"Uribe no es punta de lanza"
Misas agrega que, a pesar de las presiones de Estados Unidos, Uribe no se ha convertido en la "punta de lanza" contra Chávez.
El encuentro Uribe-Chávez de este viernes, que durará unas seis horas en la hacienda presidencial de Hatogrande, estuvo precedido por llamadas telefónicas a los dos mandatarios por parte del presidente francés, Nicolás Sarkozy.
Sarkozy, que el jueves habló 12 minutos con Uribe, tiene particular interés en la suerte de la ciudadana colombo-francesa Ingrid Betancourt, quien fue secuestrada por las FARC en febrero de 2002, cuando era candidata presidencial en Colombia.
No obstante la elocuencia de ambos, Uribe y Chávez han sido muy prudentes en público cuando han hablado de las gestiones del mandatario venezolano en busca de un acuerdo con las FARC.
Entre tanto, ni el gobierno colombiano ni las FARC han cedido en sus pretensiones para negociar un acuerdo que permita la libertad de los secuestrados a cambio de la de guerrilleros presos.
Uribe insiste en que no desmilitarizará dos municipios del suroccidente de Colombia para discutir los términos del intercambio y ha dicho que sólo liberará a los guerrilleros que se comprometan a no retomar las armas.
Uribe insiste en que no desmilitarizará dos municipios del suroccidente de Colombia para discutir los términos del intercambio y ha dicho que sólo liberará a los guerrilleros que se comprometan a no retomar las armas.
Pero las FARC insisten en la desmilitarización, no aceptan las condiciones de Uribe para la liberación de guerrilleros y exigen la libertad de todos sus cuadros, incluidos dos que fueron extraditados a Estados Unidos: "Simón Trinidad" y "Sonia".
En ese contexto, ¿por qué deja Uribe que Chávez medie en un tema tan sensible para Colombia y que ha sido tan difícil?
¿Salto al vacío?
Misas, en diálogo con BBC Mundo, expresa que él cree que se trata de "un salto al vacío poner al presidente Chávez a mediar, sabiendo que las posiciones están tomadas".
"A mi modo de ver es una salida, en una situación muy apurada del gobierno, una cortina de humo para mirar qué se puede hacer", añade.
Según Misas, es muy difícil que se pueda lograr un acuerdo humanitario para liberar a los rehenes mientras las partes no cedan.
En diálogo con BBC Mundo, la profesora Socorro Ramírez, de la Universidad Nacional de Colombia, considera que, desde su pragmatismo, Uribe "ve que Chávez es el único personaje que puede incidir en un acercamiento con la guerrilla, en la medida en que tiene afinidad ideológica y reconoce su liderazgo".
Sin embargo, Ramírez admite que la participación de Chávez en la búsqueda de un acuerdo humanitario para intercambiar secuestrados por guerrilleros presos "es una apuesta muy riesgosa" para los dos presidentes.
Y explica que si la gestión de Chávez fracasa es probable "que pueda haber una afectación importante de la relación" entre Colombia y Venezuela.
Pero si lo logra, sostiene Ramírez, Chávez "le coge ventaja a Luiz Inasio Lula da Silva en el liderazgo regional".
La experta agrega que a pesar de que Colombia y Venezuela tienen las "dos opciones más antagónicas en el continente", después de un forcejeo entre Uribe y Chávez "ambos han llegado a un punto en el que ven que hay temas de la vecindad favorables".
Necesidad
"El tema energético y de infraestructura es una necesidad para los dos países.
Ahí han puesto el acento ambos gobiernos. Hay por lo menos cinco negocios importantes y uno de ellos es el de la conexión interoceánica", concluye.
Por su parte, Misas considera que si el mandatario venezolano llega a ser exitoso en el acuerdo humanitario, "el riesgo para Colombia es mínimo".
"Los réditos para Chávez serían importantes, pero no de carácter estratégico. En Colombia no hay un movimiento chavista y no hay riesgos de que ninguna fuerza política lo pudiera capitalizar", concluye.
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